sábado, 31 de julio de 2010

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Un Gordo en la prensa

De todos los ex presos Disidentes que llegaron liberados a España, gracias a las gestiones del Cardenal Jaime Ortega y del Gobierno Socialista de Zapatero, el que más atención ha recibido de la prensa española ha sido el “gordo” Ricardo González a quien desde que arribó a Madrid lo han entrevistado en más de 30 ocasiones y ha sostenido reuniones con el ex jefe del gobierno José María Aznar y con la presidenta de la Comunidad de Madrid Esperanza Aguirre. Al “Gordo” lo consideran el “líder del grupo y como tal habla y come por todos los demás. En la última entrevistas del reportero Joaquín Gil para el diario “El País” el Gordo dijo que en Cuba era “Periodista Independiente” trabajando para Reporteros sin Fronteras” y para “Cuba-Press” una agencia de noticias con base en Miami que recibe fondos del gobierno de Estados Unidos. De él, dijo “El País” a manera de presentación: “Ha llegado a España con toda su familia: su esposa, Álida, y la hija de ambos, Rocío, de 13 años; y su ex mujer, Gladys, junto a los hijos que tuvieron, Daniel y David, de 16 y 22 años. "Nos llevamos de maravilla", coinciden sonrientes en el comedor del hostal. El Gobierno español asume los gastos de alojamiento y dietas de los 20 disidentes excarcelados y del centenar de familiares que han venido con ellos”.

Lo que no dijo El País.

Entre los familiares de uno de los disidentes llegó el actual esposo de Gladys, la ex-esposa del Gordo Ricardo González, con sus dos hijos de un anterior matrimonio. No hay reportes si la ex esposa del esposo de Gladis también llegó ya a Madrid con sus hijos de un anterior matrimonio o se encuentran en la lista de espera de los viajes gratis, con comida, habitación y transporte incluidos.

¿Pensionados?

Ni locos. Un funcionario español les propuso a los disidentes mayores de 50 años, una pensión vitalicia. Algunos respondieron que aceptarían si la pensión no tomaba en cuenta la edad, pues debían contemplar a todos los miembros de la familia, incluidos los niños. Ya conocen que en España con lo que le pagan a los que se han pasado una vida trabajando no les alcanza para vivir y deben pasar la cuarta semana del mes en huelga de hambre obligatoria.

El costo de una huelga de hambre.

En Cuba no han sacado la cuenta pero en Miami sí. De acuerdo a lo que nos dijo un empleado del Departamento de Contabilidad del Hospital Jackson – uno de los más baratos del sur de La Florida- un enfermo que esté internado en ese centro de salud, su atención costaría un promedio de unos dos mil dólares diarios, sin contar con lo que cobren los médicos y especialistas que estén tratando al paciente. Eso cuando la enfermedad no sea de extrema gravedad, que requiera un cuidado especial. Si las matemáticas no fallan, 135 días de hospitalización en el Jackson o en cualquier otro hospital de Miami le costaría al paciente unos 270 mil dólares. El “Coco” Guillermo Fariñas acaba de salir vivito y coleado, del hospital para su casa de la ciudad de Santa Clara, después de estar allí bajo intenso cuidado médico exactamente 135 días. Ni uno más ni uno menos. Los médicos cubanos le salvaron la vida a un hombre que decía que se quería morir. Y todo eso gratis, sin que le haya costado un “Coco” al “Coco”. ¡Y ni las gracias dio!

La Reina Sofía

Gran alegría y regocijo reinó entre los disidentes cubanos, cuando les comentaron que irían a visitar el Reina Sofía. Ellos y ellas se merecen ese recibimiento y muchos otros. Se imaginaron que la Reina Sofía los recibiría. Uno de los empleados del hostal comentó: ¿Qué tienen en la cabeza estas personas? En el estómago ya sabemos, pues han solicitado que el desayuno debe estar reforzado. Todo se aclaró que se trataba de una visita cultural al Museo Reina Sofía, pero ellos no están para esas boberías, preferían ir de compras al Corte Inglés para dar uso a una tarjetas de créditos que les envió como regalo de la Comunidad de Madrid, la señora Esperanza Aguirre.

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